domingo, 15 de mayo de 2022

HORTALIZAS Y FLORES, SIMBIÓSIS EN NUESTRO HUERTO

A petición de algunos lectores y amigos vamos a estudiar las cualidades y propiedades de algunas hortalizas, hierbas y flores que se pueden plantar en nuestro huerto o jardín por su capacidad para combatir plagas, atraer insectos
Borraja en flor
Foto: Pixabay
polinizadores o depredadores, potenciando al mismo tiempo su crecimiento, sabor y productividad.
A algunos de estos aliados se les conoce como "plantas trampa" porque tienen la capacidad de atraer a los insectos que causan las plagas y nos alertan del peligro que corre nuestro cultivo para que podamos tomar medidas.
Vamos a ver que plantas podemos sembrar entre nuestros: Tomates, calabacines, pimientos y patatas.

TOMATES. Los tomates están encantados de tener como vecinos a estas plantas:
Borraja, caléndulas, albahaca, ajo, capuchina, petunia, tagetes, perejil, hinojo, cilantro, tomillo, eneldo, cebollino. Veamos las virtudes de cada una:

Caléndula
Foto: Pixabay
Borraja. Protege de los gusanos del tomate, atrae insectos polinizadores y además sus hojas, tronco y flores con comestibles.
 
Caléndulas. Son plantas trampa para pulgones, gusanos, chinches y orugas. Atraen a los insectos polinizadores y además actúan como repelentes de los insectos que dañan a los tomates.

Ajos. Son muy efectivos como repelentes de plagas, especialmente de la araña roja.

Albahaca. Repele y ahuyenta a chinches, moscas, mosquitos y mosca blanca. Atrae a los beneficiosos polinizadores.

Petunia. Repele a muchos insectos dañinos para el tomate y atrae polinizadores.

Capuchina. Sirve como planta trampa para los pulgones y otros insectos

Tagetes
Foto: Pixabay
perjudiciales y su flor es comestible.

Tagetes o Caléndulas francesas. Plantadas debajo de las tomateras combaten a babosas, caracoles, orugas y otras plagas del huerto. También actúan como plantas trampa y repelen a los nematodos de las raíces.

Perejil. Actúa como planta de acolchado, protege a los tomates de plagas y ayudan a mantener la tierra húmeda.

Hinojo. Atrae polinizadores y depredadores como la mariquita. Hace muy bien de planta trampa para los pulgones y ayuda a mantener la temperatura del suelo. Además todas sus partes son comestibles.

Cilantro. Sus flores atraen insectos depredadores, mantiene la temperatura del suelo, potencia el sabor de los tomates y es comestible.

Cebollino en flor
Foto: Pixabay
Tomillo. Sembrado debajo de las tomateras atrae insectos beneficiosos, controla la presencia de gusanos y se cree que mejora el color y el sabor de los tomates.

Eneldo. Sus flores son un poderoso atractivo para polinizadores como avispas, abejas y mariquitas. También hace de planta trampa atrayendo plagas perjudiciales.

Cebollino. Combate eficazmente plagas como pulgones, nematodos y araña roja. En tortilla y en revueltos están riquísimos.

Hay cultivos que no se deben plantar nunca junto a los tomates: repollos, berenjenas, coliflores, colinabos, patatas, maíz.

Hierba gatera
Foto: Pixabay

CALABACINES. Entre nuestros calabacines podemos sembrar estas plantas: Borraja, capuchina, tagetes, eneldo, ajo, perejil (estos cultivos ya están analizados en el apartado de los tomates). Cebolletas, hierba gatera, rábanos:

Cebolletas. Sus flores púrpuras son un atractivo especial para insectos benéficos y polinizadores. Son también un buen repelente contra pulgones y escarabajos del pepino.

Hierba gatera. Su floración continúa desde primavera a finales de otoño, atrae numerosos polinizadores y además la planta combate plagas de ratones, pulgones, gorgojos, hormigas, ratas, chinches.

Rabanitos
Foto: Pixabay
Rábanos. Repelen plagas asiduas del calabacín tales como los pulgones, chinches y escarabajos.

Los cultivos que no son compatibles con los calabacines son: hinojo, patatas, calabazas.

PIMIENTOS. Estos mantienen unas buenas relaciones con: Ajos, rábanos, eneldo, cilantro, perejil, albahaca, borraja, tagetes, capuchina, caléndulas, petunia (cultivos ya vistos en apartados anteriores). Zanahorias, orégano, mejorana, romero, apio, geranio, diente de león, bálsamo de abeja.

Geranio
Foto: Pixabay
Zanahorias. No les quitan recursos a los pimientos, aflojan la tierra y se pueden intercalar entre otras hortalizas de hoja.

Orégano. Actúa como acolchador y mantiene la humedad de la tierra.

Mejorana. Se siembra en los bordes de la zona de los pimientos porque atrae a insectos beneficiosos.

Romero. Sus flores atraen a los insectos polinizadores y puede usarse como cortavientos de cultivos más sensibles.

Bálsamo de abeja
Foto: Pixabay
Apio. Atrae a muchos polinizadores y tiene unas interesantes propiedades como hortaliza.

Geranio. Repele algunas plagas y atrae polinizadores.

Diente de León. Liberan etileno para la maduración de los frutos y se puede cortar y mezclar con el suelo para añadirle sus nutrientes.

Bálsamo de Abeja. Sus flores son muy atractivas para polinizadores como las abejas y mariquitas. Son plantas perennes y mejoran el sabor de los pimientos.

Nuestros pimientos se llevan mal con los siguientes cultivos: patatas, albaricoques, cucurbitáceas o hinojo.

PATATAS. Estos tubérculos admiten un montón de vecinos: 

Arveja
Foto: Pixabay
Ajos, cebolletas, rábanos, tomillo, albahaca, perejil, salvia, cilantro, apio, tagetes, caléndulas, capuchina, borraja, petunias (plantas ya vistas en anteriores apartados). Allysum, trébol, arvejas, hierbabuena, tanaceto, milenrama, manzanilla, cebollas y guisantes.

Allysum. Sirve como acolchante para inhibir el crecimiento de hierbajos y además sus flores atraen a depredadores y polinizadores como las abejas, avispas, mariquitas…

Trébol. Las patatas necesitan una buena cantidad de nitrógeno en el suelo y esta “mala hierba” se lo proporciona.

Arveja. Es una legumbre parecida al guisante que tiene también la capacidad de fijar el nitrógeno al suelo.

Milenrama
Foto: Pixabay
Hierbabuena. Mantiene alejado al escarabajo de la patata gracias a su fuerte olor, además de ser una hierba aromática muy utilizada en la cocina. Conviene sembrarla en el perímetro del patatar.

Tanaceto. Es una planta con múltiples usos, entre ellos destacan su capacidad para atraer a los polinizadores y el hecho de que puede usarse en infusiones repelentes de insectos.

Milenrama. Se puede sembrar entre las patatas porque ayuda a aflojar la tierra, atrae multitud de polinizadores y cuando la cortemos o podemos sus ramas aportan a la patata muchos nutrientes necesarios.

Manzanilla. Ejerce un efecto llamada para gran cantidad de depredadores y polinizadores.

Tanaceto
Foto: Pixabay

Cebollas. Gracias a su olor actúa como repelente de plagas.

Guisantes. Aportan ese nitrógeno tan necesario para las patatas y además sirven como repelente para algunas clases de escarabajo.

Las plantas no recomendables para sembrar junto a las patatas son: frambuesas, pepinos, calabazas, tomates, zanahorias, hinojos, espárragos y algunas de la familia de las brasicáceas como repollos, coliflores, brócoli o lombardas.

Manzanilla
Foto: Pixabay